Este libro está copuesto por dieciséis fotogramas monumentales reproducidos a escala, compaginados uno tras otro, formando una gran imagen sin fin. Estos fotogramas son el resultado de un largo proceso de ocho años de hacerse d euna técnica y una gramática particular. SOn imágenes en negativo especulares que transitan entre la huella y la ficción, entre la presencia y la ausencia.
Esta investigación visual recupera uno de los procedimientos iniciales de la fotografía: el fotograma que, junto a un proceso de desaprendizaje de prejuicios culturales, es utilizado como soporte para representar un vínculo horizontal distinto con lo que nos rodea, con la naturaleza entendida como sujeto y con la cultura primigenia entendida como igual.
Todo esto se enmarca en una estrategia de pérdida de control del proceso, donde la autoría va convirtiéndose en un medio que permite la aparición de ese universo visual.