La Línea Blanca es un proyecto desarrollado en el Círculo Polar Ártico entre los años 2016 y 2019, concretamente en las regiones de Kulusuk y Qaanaaq en Groenlandia, Yamalia en Siberia, y Laponia Noruega y finlandesa.
Aborda la región ártica como el lugar donde volver a la serenidad y sencillez original del ser humano, describe la inmensidad blanca del ártico, y a los pueblos que la habitan en armonía con la naturaleza.